Durante el gobierno de Alfredo del Mazo Maza en Huixquilucan, creció la dependencia del municipio a los recursos federales, se desplomó la recaudación, creció el gasto en sueldos, disminuyó la obra pública, no se pagó el ISR de los trabajadores en 2010, se reprobó en transparencia municipal y se calificó de “crítico” el endeudamiento a corto plazo.

Entre 2009 y 2011, la gestión del hoy candidato a la gubernatura se caracterizó por un ligero endeudamiento a mediados del trienio que después se redujo en el último año, sin embargo es imposible saber en qué se utilizaron esos recursos, ya que el ayuntamiento de Huixquilucan retiró de su Portal de Transparencia (IPOMEX) los contratos que adjudicó Del Mazo Maza durante ese periodo.

No obstante y de acuerdo a los resultados de la auditoria a la Cuenta Pública del gobierno del Estado de México y los Municipios en 2010, 2011 y 2012, fue posible conocer que en el primer año del gobierno de Del Mazo se redujo de 50.50% a 44.81% la autonomía financiera de Huixquilucan, debido a que la deuda aumentó ese año del 2009 a 2010, en su primer año, de mil 62 millones 572 mil pesos, a mil 136 millones 615 mil 200 pesos.

En el primer año, Del Mazo se endeudo con 323 millones en deuda de largo plazo, para enfrentar los pasivos que arrastraba. La autonomía financiera pasó en solo un año de 50.50% a 44.81% del 2009 a 2010, mientras que para su salida, en 2012, el 61% de los ingresos ordinarios estaban comprometidos pues eran equivalentes al monto de su deuda.

La eficacia recaudatoria de su gobierno también fue en reversa al pasar del 86.81% en 2009 a 76.81% en 2010, mientras que en ese mismo lapso la cobertura de protección a zonas de riego del municipio paso del 100% a 18.92%; en tanto que el gasto en servicios personales (nómina), aumento más de 20 millones de pesos en su primer año de gestión.
Adicionalmente a su salida, la taza de recaudación de predial pasó del 12.41% en 2011 a 0% (cero por ciento) en 2012, año electoral en el que Huisquilucan, todavía al frente de Del Mazo, no cobró un peso por ese concepto.

Asimismo en 2011 se reportó que el 44.5% del presupuesto se destinaba a servicios personales y a inversión pública solo el 7.8%, de acuerdo al OSFEM, el cual también reporto que mientras al pago de los servicios personales el gobierno de Alfredo del Mazo destinó el 44.5% de los recursos, en obra pública solo invirtió el 7.8% y al pago de deuda el 16.4%.

Sus peores calificación fueron en eficiencia recaudatoria al cierre de su gestión en 2012, pues dejó de cobrar el agua; obtuvo calificación reprobatoria en "transparencia municipal" y el impacto de la deuda a corto plazo pasó del 18.41% a 37.48% sobre sus ingresos.
En su primer año el OSFEM le hizo observaciones por 78 millones 215 mil pesos, de los cuales solventó, al momento de publicarse la Cuenta Pública del 2010, 24 millones 322 mil pesos.

A lo largo de su gestión continuó destinándose más recursos a servicios personales que a inversión pública, y aunque en el último año bajo ligeramente la deuda en 192 millones en su último año, continuaron las malas calificación con una tasa de recaudación del 0% en el impuesto predial, no obstante que en 2011 dicha tasa se ubicaba en 12.41%.