Los comicios del domingo 4 de junio, desbancaron al PRI como la primera fuerza política estatal en el Estado de México, como resultado de su desplazamiento a una segunda posición por parte del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), sin contar que el 70% de los mexiquenses votaron en contra del candidato Alfredo del Mazo y que el 49.6% lo hizo por un partido de izquierda.
Si bien el PRI habría ganado los comicios por casi un tercio, tras una jornada que continúa bajo sospecha, como partido perdió su hegemonía de casi nueve décadas, de acuerdo a los resultados definitivos de la contienda dados a conocer por el Instituto Electoral del Estado de México (IEEM), pero ya desagregados –separados- por partido y distrito.
En estos resultados que ya son los definitivos en el cómputo distrital que cerró el pasado 9 de junio, el tricolor obtuvo una votación sólo como partido, es decir sin aliados, de 1 millón 812 mil 575 sufragios, mientras que Morena obtuvo 1 millón 879 mil 426 votos.
La diferencia entre uno y otro es de 66 mil 851 votos a favor del partido con el que contendió la maestra Delfina Gómez, una modesta maestra de primaria que a golpe de un discurso sencillo e incluso plagado de errores de dicción, logró dar al dinosaurio un golpe descomunal que lo ha doblado.
Pero ese no fue el único cambio importante en la geopolítica mexiquense, ya que el Partido Acción Nacional (PAN), bajo del segundo al cuarto lugar en las preferencias electorales de los mexiquenses, al haber obtenido solamente 685 mil 563 votos.
En su lugar se posicionó el PRD, con un millón 87 mil 608 sufragios, por lo cual con un cómodo margen quedo en tercer sitio después de Morena y el PRI.
Los resultados desagregados por partido, también algo que es definitivo –claro si es que no se tuerce la ley-, que la “chiquillada”, incluido el PT que en el último momento se alió con Morena, quedará fuera de las prerrogativas del año próximo en el Estado de México, pues ninguno logró el 3% mínimo de votos que marca el código electoral, para tener acceso a financiamiento público.
En este sentido el PT obtuvo solo 65 mil 659 votos; el PVEM, 76 mil 335; PNA, 55 mil 06 votos y PES, 41 mil 888 sufragios.
Curiosamente los votos que obtuvo la candidata “independiente”, Teresa Castell, superan con mucho lo realizado por los partidos pequeños, ya que logró 130 mil 625 sufragios, lo que representa un porcentaje de 2.1% de la votación total emitida.
Los resultados definitivos de la contienda, podrían ser un referente para lo que podría ocurrir el año próximo en el Estado de México, donde nuevamente habrá elecciones locales para renovar el Congreso Local y los 125 municipios, pues de hecho aquí serán elecciones concurrentes, señaló el académico de la Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM), Eduardo Campa Garduño.
Recordó que estos resultados podrían dar indicios de lo que puede ocurrir en 2018 en Edomex, donde por primera vez habrá reelección, con lo cual el tricolor podría repetir en los más de 90 municipios que gobierna, pero eso ya no es tan seguro, opinó.
Ahora, a partir de estos resultados, el tricolor deberá evaluar si le conviene ir a las alcaldías y distritos que hoy gobierna, con los mismos alcaldes y diputados o definitivamente, postular nuevos aspirantes.
Actualmente el tricolor gobierna 82 comunas, pues en 2015 tuvo una debacle importante al perder casi todo el corredor azul, mientas que el domingo antepasado perdió prácticamente todos los municipios metropolitanos más importantes, incluidos Ecatepec, Tlalnepantla, Ixtapaluca y Tecámac entre otros.
OTRAS NOVEDADES
A partir de los resultados dados a conocer por el IEEM y desagregados por partido político, se pueden destacar otras novedades, como por ejemplo que aún cuando el PRI se impuso, mediante la compra masiva de votos y uso de recursos públicos para retener la gubernatura, perdió al menos 13 de los distritos estratégicos más importantes, debido a que concentran los municipios más poblados de la zona metropolitana del Valle de México.
Otra novedad importante, es que si se suman los votos que obtuvieron en conjunto los partidos de "izquierda", encontraremos que casi la mitad de los mexiquenses que acudieron a las urnas el 4 de junio "viraron a la izquierda", es decir, si sumamos el 30.31% de los votos que obtuvo Morena, el 17.88% que se adjudicó el PRD y el 1.07% del PT, tenemos que el voto de la izquierda en Edomex no solo es histórico, podría ser premonitorio del 2018.