El Partido Revolucionario Institucional (PRI), quiere seguir manteniéndose en el gobierno para asegurarse que deja atrás un sistema con privilegios para unos cuantos, aseguró José Narro Robles, quien reconoció que al PRI le queda pendiente una reforma, una revolución social profunda e incluyente, que dijo, corrija "los males de siempre", como la injusticia y la impunidad.

Al participar en la Mesa del “Programa de Acción” de la 22 Asamblea Nacional Ordinaria, que se desarrolla en esta ciudad, el funcionario federal enunció el discurso más crítico de la jornada aquí, al indicar que el PRI ha logrado avances importantes con el gobierno de Enrique Peña Nieto.

“Queremos seguir en el gobierno para asegurarnos que dejamos atrás un sistema con privilegios para algunos y que alcanzaremos otro, uno con derechos exigibles para todos, uno que incluya a todos los grupos y regiones, que atenúa las diferencias, que procura a la niñez y la juventud, a las mujeres e indígenas, grupos diferentes, clases medias y populares, uno que impulsa el desarrollo regional y no olvida ningún espacio de nuestra geografía”, indicó.

Ante más de 300 delegados, el funcionario federal dijo que el PRI debe emprender una “profunda reforma” que permita cumplir las aspiraciones de Morelos, para acabar con la pobreza extrema y desigualdad.

“Conseguir que los males de siempre se corrijan, que la ignorancia, la muerte evitable, la injusticia y la impunidad dejen ser parte de nuestra realidad”, sostuvo.

Acompañado por senadores, diputados y delegados regionales procedentes de diversas partes del país, entre los que se encontraban el gobernador electo del Estado de México, Alfredo del Mazo Maza, el exrector de la UNAM señaló que el gobierno de Enrique Peña ha dado pasos importantes y con resultados medibles, aunque todavía con una reforma social pendiente.

“Una reforma que permita cumplir lo que con Morelos y muchos otros pensaron en su tiempo, acabar con la pobreza extrema y la desigualdad que nos lacera, conseguir que los males de siempre se corrijan y la ignorancia, la muerte evitable, la corrupción, la injusticia y la impunidad dejen de ser parte de nuestra realidad”, señaló.

El exrector de la UNAM fue insistente en el sentido de que la revolución del Revolucionario Institucional, debe tomar otros rumbos e incluso cambiar su discurso, pues aseguró que las prioridades deben centrarse en grupos que han estado socialmente excluidos.

“Reconocer que la revolución de hoy es el compromiso con aquellos que no han estado incluidos plenamente en el desarrollo, quienes no disponen de lo indispensable, con quienes viven en la oscuridad del analfabetismo, y el rezago educativo, con los que enferman de males prevenibles, con los que resultan afectados por la violencia, la inseguridad y la debilidad del estado de derecho”, puntualizó.

Durante los trabajos, delegados de diversos sectores, demandaron que el programa de acción del PRI para los próximos años, incluya programas que atiendan de forma efectiva las demandas del campo; mayores apoyos para las mujeres; estrategias en materia de educación, con becas para grupos marginados y combatir la violencia política contra las mujeres, con una mayor inclusión en los escaños y carteras del tricolor.

El Programa de Acción está organizado en seis ejes: gobernabilidad democrática , educación de calidad para construir una sociedad del conocimiento, una economía abierta, Mexico sin pobreza y con prosperidad, seguridad pública eficaz y sistema de justicia eficiente; y un México abierto al mundo.

Tere Montaño