16 de septiembre de 2017

En el primer día de gestión del gobernador Alfredo del Mazo Maza, se impidió el acceso al Palacio de Gobierno a los representantes de los medios de comunciación, para la cobertura del desfile cívico militar del 16 de septiembre, poniendo fin de esta manera a una tradición de al menos 40 años, en la que los periodistas locales y nacionales podían acceder al Salón “Del Pueblo” e interactuar con altos funcionarios del gabinete.

La limitante se impuso desde la noche previa, cuando la mayoría de los reporteros se quedó esperando su tradicional “acreditación” de cobertura del desfile y luego por la mañana, al llegar al lugar, cuando fueron informados que para la prensa estaba prohibido el acceso.

Docenas de periodistas intentaron por diversos medios ingresar al lugar, consultando a funcionarios de comunicación social que llegaron con la gestión de Eruviel Avila y continuaban despachando. Personal operativo de esa área informó que las órdenes para impedir el acceso a la prensa, provenía directamente de la nueva administración.

De esta manera y como complemento, el palacio sede del Poder Ejecutivo quedó completamente blindado. Los accesos en la periferia fueron cerrados totalmente, mientras que se colocaron filtros para los altos funcionarios desde una cuadra antes, por los que estos entraron al lugar a bordo de camionetas y tenían la instrucción de tampoco dar entrevistas.

Debido a que el nuevo gobierno tampoco distribuyó acreditaciones para la cobertura del Desfile a nivel tierra, se registraron connatos de bronca entre reporteros y policias, que por cientos custodiaban el evento en prácticamente todo el trayecto del desfile.

A la altura de la Plaza Angel María Garibay Quintana, el fotógrafo Francisco Cruz fue agredido por policías cuando intentó incorporarse cerca del flujo del desfile cívico-militar para realizar su trabajo. Los uniformados, que además comenzaron a grabarlo, le pidieron que se identificara mientras tres de ellos le obstaculizaban el paso, el fotógrafo se acreditó con su credencial del medio, pero le pidieron la “acreditación oficial” para acceder al Desfile, la cual no portaba porque simplemente nadie acredito a la prensa.

A lo largo de lo que se transformó en una jornada de confusiones, otros funcionarios también sufrieron el desorden que ha privado en la transición sexenal.

El rector de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM), Alfredo Barrera, llegó con al menos una docena de sus integrantes del Consejo Universitario y su jefe de prensa, pero a éstos no se les permitió el acceso y se quedaron parados a media calle, ya que únicamente pudo entrar el rector.

Casi a punto de terminar el desfile, cerca de las 12:00 del día, se corrió la voz entre los periodistas que personal de palacio bajó y salió del inmueble para invitar a reporteros a subir al Salón del Pueblo, pero bajo la premisa de que "no habría entrevistas", por lo que la mayoría de los comunicadores que aún estaban en la zona, se excusaron y prefirieron irse, ya que la tradición del evento es justamente la interacción con el gobernador en turno y los altos funcionarios.

Hasta el cierre de esta edición, no se llevaba a cabo una presentación formal del nuevo gabinete de Alfredo del Mazo, ni ningún tipo de interacción con representantes de medios locales y corresponsales de medios nacionales.




Mary Delgado