22 de marzo de 2019

El alcalde de la capital, Juan Rodolfo Sánchez Gómez, manifestó su rechazó a un eventual incremento a las tarifas de transporte en el Valle de Toluca, por considerarlo “severo y fuerte”, pues sería en términos reales del 40%.

Dijo que como representante de los ciudadanos del municipio, decidió “elevar la voz ante el pretendido aumento a la tarifa del transporte público, pese a no ser competencia del gobierno municipal”.

Mencionó que más allá de las “legítimas” aspiraciones de mejoramiento de las 28 empresas transportistas que anunciaron este aumento, “no debe hacerse a costa de los ciudadanos".

“Nuestra posición indudablemente no pierde de vista la legítima utilidad a la que pueda aspirar la empresa, en este caso del transporte, pero no se debe hacer a costa de los ciudadanos; sentimos que tiene que ser una posición justa y en este caso la justicia tiene que ser legal, así es que tomaremos en cuenta este planteamiento para hacer propuestas concretas”.

El alcalde reiteró que deben agotarse todos los criterios legales de tal suerte que el incrementó, que además sería de cuatro pesos, es “severo y fuerte”, pues representa un 40%, respecto de las tarifas actuales, además de destacar el hecho de los altos índices de contaminación que son responsabilidad del sector y el desorden que generan en materia de tráfico.

“Pedimos que se agoten los criterios legales de forma tal que un incremento, que además es tan fuerte, son 4 pesos, 40 por ciento, es de entrada severo y fuerte, a lo que agregamos que está comprobado que la fuente generadora de más del 60 por ciento de los contaminantes del Valle de Toluca es el transporte público y que hay un problema severo en las vialidades porque invaden segundos y terceros carriles, porque hay muchos vehículos. Se sabe desde hace muchos años que en Toluca está excedido el número de concesionarios del transporte público”.

PRD SE SUMA AL RECHAZO:

Por su parte el dirigente estatal del PRD, Omar Ortega, rechazó que existan condiciones que justifiquen un aumento en las tarifas del transporte de la entidad y de la capital, ya que las condiciones en que ha venido operando el sector, son de “inseguridad y mala calidad.

Refirió que hace poco menos de dos años se autorizó un aumento de dos pesos al pasaje mínimo, que pasó de 8 a 10 pesos, luego de que arbitrariamente lo subieran sin la autorización del gobierno del estado, eran tiempos electorales, tal vez por eso la respuesta gubernamental fue casi nula, recordó el también legislador.

Recordó que en ese entonces se comprometieron a llevar a la práctica un decálogo que entre otras cosas incluía la regularización de unidades, renovación del parque vehicular, la instalación de cámaras de seguridad y GPS, además de la capacitación constante de los operadores, cosa que no han cumplido.

“Aunado a eso, ninguna empresa, ningún particular puede emplazar y chantajear a ningún gobierno a hacer su santa voluntad, ¿el gobierno aceptará este emplazamiento y cederá a intereses particulares por encima de los intereses públicos del pueblo mexiquense? Esa es la pregunta y como oposición creo que por lo menos en el Congreso habrá una seria y firme respuesta a los concesionarios del transporte público”, dijo.

No obstante, el líder perredista confió en que en las próximas horas el ejecutivo se pronuncie al respecto, anteponiendo la economía familiar de los mexiquenses.

“Por nuestra parte dejo en claro que la economía familiar de los mexiquenses no está sujeta a capricho de particulares y si a los señores no les resulta redituable el invertir en transporte, tienen toda la libertad de invertir en otros rubros y el gobierno de poner a disposición las concesiones a nuevas inversiones”, concluyó.

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