No es para menos. Espacios de este tipo que se localizan al pie de la avenida Adolfo López Mateos y sobre la vialidad Alfredo del Mazo, se han convertido más que en un elemento de seguridad, en uno de “alto riesgo” para la población, sobre todo en ciertos horarios del día, comentaron vecinos que viven en las cercanías.

En el módulo, por ejemplo que se ubica sobre la Avenida Adolfo López Mateos y uno más que se encuentra cerca a la entrada de la población de San Lorenzo, los vecinos aseguran que, en el primer caso, se ha convertido en refugio de indigentes y adictos, mientras que el segundo es utilizado por carteristas y asaltantes del transporte público, que corren a refugiarse en sus instalaciones o desde ahí merodean a los usuarios del transporte para luego asaltarlos.

Algunos de estos módulos, como el ubicado en la Adolfo López Mateos, han sido usados por el gobierno de Alfredo del Mazo para promocionar los colores de su gobierno, pero en la realidad son cáscarones abandonados y heredados así por las pasadas administraciones, al nuevo gobierno morenista de la capital.

Ante este abandono, el regidor Chavarría Sánchez, propuso que se les hagan modificaciones para transformarlos en “pequeños bunkers” desde donde realmente se pueda hacer vigilancia sin que los policías queden expuestos.

Reconoció que estructuralmente, los módulos, tal y como fueron diseñados, representan un riesgo para los elementos de seguridad, ya que cuentan con amplias ventanas que convierten a los policías en blancos fáciles para las bandas delictivas que merodean algunas zonas y que en muchas de las ocasiones están armados.

Estimó que la inversión que tendría que hacerse a cada módulo no sería mayor a los 90 mil pesos, para hacer adecuaciones que permitirían recuperar estos espacios desde donde se puede hacer “vigía” en las zonas de mayor peligro, pero sin que ellos les represente un riesgo significativo a los elementos.

Las modificaciones consistirían en reforzar entradas y desaparecer los ventanales de los módulos, para colocar en su lugar pequeñas franjas de ventanillas a una altura segura y horizontales, que permitan la vigilancia de largo alcance y con vidrios de seguridad.

Se estima que actualmente hay 58 módulos distribuidos en todo el municipios, y hasta el trienio pasado se tenía el registro de unos 30 que se pusieron a resguardo de organizaciones civiles, sin embargo un recorrido de este Portal, permitió establecer que la mayoría están abandonados.

Cada módulo tiene un costo a precios actuales de un millón 300 mil pesos, por lo cual se estima que la inversión pública subutilizada ronda actualmente los cien millones de pesos.

ALISTAN RESCATES

Entrevistado al respecto, el presidente municipal de Toluca, Juan Rodolfo Sánchez Gómez, aseguró que se prepara un programa de rescate para algunos de esos módulos de seguridad, pues reconoció que la mayoría los abandonaron.

Admitió que para hacerlos funcionales, deberán hacerse algunos arreglos a su estructura, por lo cual ya se analizan los cambios que podrían adaptarse.