3 de octubre de 2019

En conferencia de prensa matutina, el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que los “cinturones de paz” compuestos por servidores públicos sin entrenamiento ni capacitación en control de disturbios, fueron un éxito.

“Agradecerle a los ciudadanos porque ayudaron mucho para evitar violencia. Hubo, desde luego, algunos hechos pero no como la vez pasada. Nos ayudó mucho la gente, por eso les agradecemos, les mandamos un abrazo a todos los que de blanco hicieron estos cordones de paz y evitaron actos violentos”. A pesar de que los actos violentos no se evitaron, pues el saldo fue de 14 lesionados -entre ellos, una mujer cuyo cabello fue incendiado por una bomba molotov-, tres detenidos que fueron liberados 16 minutos después, y daños en edificios como la sede del Banco de México.

Además, hubo sucesos donde los mismos cinturones se rompieron, pues los servidores públicos que conformaban la valla y que resguardaban la Avenida 5 de Mayo, incluso, se quitaron las playeras blancas que les dieron como distintivo para evitar riesgos a su persona ante las agresiones de grupos autodenominados como “anarquistas” y del “bloque negro” que conformaban uno de los muchos contingentes que se unieron a la marcha y que, a pesar de ser minoría -en el evento estaban los padres de los normalistas de Ayotzinapa- fueron el grupo encargado ocasionar los destrozos.

Los grupos de encapuchados fueron encapsulados en la calle 5 de Mayo; quedaron en medio de un grupo de manifestantes y policías que respondieron a las agresiones. “Llegamos por nuestros propios medios, al cuestionar si era obligatorio venir, nuestros jefes directos nos señalaron que estábamos en nuestro horario de trabajo y que debíamos asistir”, aseguró un funcionario de los cinturones de paz al periódico Excelsior.

A su vez, el presidente aseguró que el cinturón de paz evitó que hubiera violencia, pese a reportes y evidencias en redes sociales de lo contrario, y pese a las cifras presentadas líneas arriba.

El presidente no informó si acusó a los encapuchados con sus mamás, como había advertido el día anterior. “¿Qué le diría yo a los que se encapuchan y realizan estos actos? Que tengan cuidado, porque en una de esas los voy a acusar con sus mamás, papás, abuelas, porque estoy seguro de que los abuelos, las mamás, los papás no están de acuerdo. ¡Me dejo de llamar Andrés Manuel!”. Expresó el día de ayer como medida para evitar los disturbios.

En la misma conferencia, respaldó la versión de la presidente nacional de Morena, Yeidckol Polevnsky, de que por error de su contador se le hayan condonado 16 millones de pesos en impuestos en 2013.

“Puede ser, se veía como algo normal. Hay despachos donde el propósito es cómo evadir el pago de impuestos, como no cumplir con nuestras obligaciones, y hay otros despachos que se las saben de todas toditas y siempre buscan cómo quitarles impuestos a sus clientes y hasta presumen que le ganan a Hacienda y el SAT en tribunales”, opinó.

El día anterior, la lideresa de Morena había asegurado: “No recuerdo la cantidad de impuestos pagados en 2013, pero en mi vida he pagado muchos. Yo venía del mundo empresarial y renuncié a eso para apoyar a López Obrador y el contador me puso con actividad empresarial cuando la había dejado tiempo atrás. Yo estaba como asalariada en el Senado” para justificar la condonación de 16 millones de pesos durante el sexenio de Enrique Peña Nieto.  

Héctor Castañeda