La detención y extradición de Emilio Lozoya a México, debería poner nervioso a más de uno del Estado de México, considerando que si hay alguien que pudo haber sido uno de los grandes beneficiarios de la corrupción en PEMEX, sin descartar algún nivel directo o indirecto de complicidad –dadas las relaciones familiares y políticas con el expresidente Enrique Peña-, es el mismísimo Alfredo del Mazo, para cuya campaña del 2017, en un proceso ya de por si cuestionado, se habrían captado recursos ilícitos para fondear su campaña electoral.
Pues sí, los huevos de la “gallina de oro” de México, incluso los espurios –me refiero a los huevos, claro, a los que produjo PEMEX con acciones ilícitas de su director-, pudieron servir para abonar aquellas agresivas campañas del PRI mexiquense que en 2017 permitieron a Del Mazo arribar al poder, bajo un proceso que hasta en su momento el propio Andrés Manuel, declaró como fraudulento.
Pero no solo por eso deberían encenderse las alarmas entre la clase política mexiquense, ya que la investigación y las presiones que están recibiendo las autoridades federales incluso desde el extranjero, podría derivar en un “maxiproceso” en el que direccionalmente las baterías podrían terminar explotando en Edomex... claro si en medio no se interpone antes alguno de los acuerdos o pactos AMLO-Del Mazo, de los que tanto se ha especulado. ¿Que no existen?, ¿Qué son mera ilusión?, bueno, pues ahora es cuando...
Cómo sea, lo que es un hecho, es que por primera vez en la historia moderna, la corruptísima clase política mexiquense podría estar en jaque, pues el otro gran beneficiario de los desvíos y malos manejos dirigidos desde PEMEX -con la venta ilegal de contratos a Odebrecht- , sería el propio Enrique Peña para los comicios del 2012 y 2018.
Por otro lado, y mientras la pandemia del COVID-19, muestra al parecer cierto declive en la entidad mexiquense (salvo claro que el gobierno estatal no esté alterando las cifras para empujar la reactivación económica que tanto les afecta, no olvidemos que son los dueños de Edomex), la actuación de la LX Legislatura parece atascarse, lo mismo que muchos gobiernos municipales que arribaron bajo el signo de la 4T, pero que a la postre resultaron más panistas que los priístas de Morena... o sea. Toluca y Metepec son el referente y el peor ejemplo también (altísima corrupción y derecha de la mala).
Por lo que hace a la LX legislatura Local, en realidad será mejor que no se haga tantas ilusiones, Morena ha perdido la mayoría calificada y tres cuartas partes de quienes quedan, créame, son más panistas que el PAN de mesa y más priístas que el priísta de hueso colorado que conozca. Es una pena, pues esta Legislatura que levantó tantas expectativas, está por convertirse en una más, ante la claudicación de la agenda con la que llegaron bajo el brazo. Claro, siempre hay excepciones destacadas y un núcleo de diputades con auténtica vocación social progresista, duros y aguerridos contra la corrupción, el problema es que los han aislado y los otros son mayoría.
Para algunos expertos, se trata de otra legislatura perdida por vía de “los billetazos”, como aquella que en los años de Arturo Montiel y la primera parte del gobierno de Enrique Peña, prometía mucho, por estar integrados por una mayoría opositora al PRI, pero que a la postre terminó coptada.
Por otro lado, esperemos que los diputados al menos en una sola cosa logren hacer justicia social: la Ley de Amnistía (que sirva). La máquina de fabricar culpables que se hecho a andar en el gobierno de Arturo Montiel para maquillar cifras y que se prolongo en el gobierno de Peña Nieto, se volvió brutal con Eruviel Ávila y se perpetuó con Alfredo del Mazo, debe terminar. Por humanidad, justicia y por simplemente ser congruentes, los legisladores deben ir al fondo en el estudio de este fenómeno y apartarse de las voces oficiales que se han corrompido en todos los niveles de los sistemas de procuración e impartición de justicia de Edomex, voces que intentarán opacar el grito desesperado de miles de familias destrozadas por este sistema de justicia desviado. Hagan justicia y hagan historia... escuchen a los expertos -no oficiales- de Derechos Humanos (CDHZL y LIMEDDH), para que entiendan la complejidad del problema y del monstruo de corrupción que habita en juzgados, MPs y centros carcelarios.
Por cierto que haciendo una investigación especial para cierta revista, y checando viejos decretos de cuando Peña Nieto llego al gobierno del Estado de México, me encontré con que el nombramiento del entonces titular del OSFEM, Octavio Mena (un panista camuflageado de contador de abolengo, pero proclive a avalar la desaparición de partidas), estuvo avalado por diversos diputados integrantes de comisiones de supervisión del organismo, entre ellos, adivine quien: Maurilio Hernández y Karina Labastida...
Seguiremos informando ¡Arrroooz!
Hasta la próxima