27 de julio de 2020
Alfredo del Mazo Maza, actual gobernador del Estado de México, está detrás de las operaciones financieras para comprar el avión presidencial “José María Morelos y Pavón”, durante la gestión de su primo, Enrique Peña Nieto, cuando dirigió el Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (BANOBRAS).
El hoy mandatario fungió como director general de la institución crediticia entre 2012 y 2015. Los contratos para la compra del Boeing se finiquitaron en noviembre del 2012, solo unos meses antes de rendir su primer informe de actividades al frente del organismo, documento en el cual, sin embargo ocultó la transacción.
Específicamente a Del Mazo Maza, le tocó dirigir las maniobras crediticias junto con la Secretaría de la Defensa Nacional, para adquirir la enorme aeronave que el presidente Andrés Manuel López Obrador, hoy se niega a utilizar e intenta vender, al considerarlo un símbolo de los excesos en el poder y corrupción, que marco la gestión nietopeñista.
Durante la conferencia de prensa de esta mañana, en la que se presentó la aeronave, de regreso a México, y dos informes sobre sus costos de operación y avance en el proceso de venta, el presidente Andrés Manuel López Obrador, confirmó que la aeronave, fue adquirida con un crédito de BANOBRAS en 2012.
La aeronave, un boeign 787-8, fue comprada bajo un contrato de arrendamiento financiero a 15 años, otorgado por el BANOBRAS de Alfredo del Mazo Maza, por un monto total de 6 mil 94 millones, 689 mil 087 pesos, de acuerdo a los resultados de una auditoria de 2014, practicada por la Auditoria Superior de la Federación (ASF), a los contratos y operaciones relacionadas con el la compra de la aeronave, la cual por cierto, fue entregada hasta 2016.
En la auditoria se detallan las diversas operaciones que debió realizar Banobras para otorgar los créditos, echando mano de programas financieros y crediticios dirigidos a otros sectores como comunicaciones (abajo se anexa auditoria).
El documento sobre las transacciones financieras que rodearon la compra del avión, permite también conocer los excesos que se dieron en las operaciones. Por ejemplo, al contrato de arrendamiento entre Banobras y la Sedena, hoy es posible conocer que se endosaron a la misma adquisición de la aeronave, compras de refacciones a futuro -aparentemente para la misma aeronave-, lo que implicó una severa “observación” de la ASF, de que no se incluyeran estos conceptos.
El esquema utilizado fue el de un contrato de "arrendamiento financiero" firmado a través de la Secretaria de la Defensa Nacional (Sedena) a 15 años, es decir con cargo a la SEDENA.
Durante la conferencia de prensa, el titular de SEDENA, Luis Crecencio Sandoval, presentó un amplio informe de los gastos adicionales -al costo del arrendamiento financiero y crédito para su adquisición-, que ha tenido la manutención del avión. Por ejemplo, en 2016, el gobierno de Peña Nieto gastó 120 millones 850 mil pesos en gastos que incluyen combustibles, sueldos de la tripulación, refacciones, inspecciones, licencias, subcontrataciones de terceros y costos de 37 viajes nacionales y 18 internacionales; en 2017 gasto 110 millones 747 mil 552 pesos y en 2018, 176 millones 891 mil 656 pesos, por conceptos similares, salvo el número de viajes.
En 2017, el gobierno de Peña Nieto realizó con este avión, 48 viajes nacionales y ocho internacionales y en 2018, 37 nacionales y no hubo viajes internacionales. Al respecto AMLO refirió que esta aeronave está diseñada para viajes internacionales y largos, ya que el costo de elevarlo es muy alto, que no debe usarse para ir a Veracruz, Hidalgo o entidades locales.
Por lo anterior y su alto costo tanto de compra como de manutención, el presidente volvió a criticar duramente la adquisición del avión, lamentó los excesos de la clase política que durante el pasado sexenio, incurrió en despilfarros, mientras el país y sectores vulnerables se mantenían sumidos en la pobreza. A continuación parte de sus comentarios relacionados con la aeronave.
"Para que no haya duda o malas interpretaciones, el propósito de hacer esta rueda de prensa con el avión de fondo es para dar a conocer al pueblo de México cómo se malgobernaba al país, cómo había lujos en el gobierno durante todo el periodo neoliberal, se le daba la espalda al pueblo, sobre todo a la gente humilde, a la gente pobre y los altos funcionarios vivían colmados de privilegios, de atenciones.
Era un gobierno de ricos, para ricos, con un pueblo pobre. Esa fue la forma de gobierno durante el periodo neoliberal, ese fue el distintivo de los periodos neoliberales. Todo esto lo tenemos que estar subrayando porque hay quienes quiere regresar a esa forma de gobierno, añoran, aspiran a que continúe la corrupción, los privilegios, esa es la característica de la oposición conservadora.
Hemos hecho el compromiso de transformar a México. Se va a acabar con la corrupción, se va a desterrar la corrupción del país y ya se está avanzando en ese propósito, y se acaban los lujos en el gobierno, el derroche, los gastos superfluos.
El presupuesto es dinero del pueblo y se va a destinar siempre a apoyar a la gente que más lo necesita para garantizar el bienestar de nuestro pueblo. Ya no es un gobierno al servicio de una minoría, es un gobierno del pueblo, para el pueblo y con el pueblo”, señaló el ejecutivo en la conferencia mañanera.
EL SECRETO DE DEL MAZO
Hasta el momento, en medio de la polémica por la compra de la aeronave, el gobernador del Estado de México, Alfredo del Mazo ha mantenido silencio absoluto, sin embargo una revisión de su trayectoria, arroja que él dirigió Banobras durante el periodo en que se dio la adquisición del lujoso Boeing.
El informe de Banobras correspondiente a 2012 está firmado por el mandatario, el cual también se incluye en esta nota, sin embargo es de destacarse que el documento nunca menciona en una sola cita el “avión presidencial” o hace alusión a su adquisición o a las operaciones realizadas por la institución para otorgar el crédito. Al parecer se pretendía mantener en secreto.
En algún momento, entre 2012 y 2014, se dirigieron a Banobras solicitudes de información sobre la compra del avión presidencial. Aparentemente se entregó la información, pero se retiró la respuesta -o sólo se simuló la entrega-, ya que los documentos, que por ley deberían ser públicos no están en línea. Los links de las respuestas que supuestamente entregó Banobras, están rotos, por lo que no es posible determinar que se cumplió con la transparencia, de hecho no se cumplió pues los documentos deberían estar en línea.
Afortunadamente los documentos de la Auditoria Superior de la Federación (ASF), revelan hoy su incómodo secreto sobre el uso de partidas crediticias que se usaron para fondear el crédito para la adquisición del avión presidencial. La auditoria es posible conocerla porque se aplicó a las transacciones que reportó la SEDENA, sin embargo Alfredo del Mazo en su informe del 2012 de Banobras, lo omitió por completo.
https://www.asf.gob.mx/Trans/Informes/IR2014i/Documentos/Auditorias/2014_0102_a.pdf
https://www.gob.mx/cms/uploads/attachment/file/74366/Informe_Anual_2012.pdf
Tere Montaño