20 de marzo de 2022




Este lunes el presidente Andrés Manuel López Obrador, contra todo pronóstico de la derecha, pondrá en marcha la primera parte del "Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles" (AIFA) construido en un tiempo récord de menos de tres años, y tras librar una intensa batalla de ataques por grupos económicos conservadores ligados al PRI y al PAN.

La obra que inaugurará el ejecutivo federal, se ubica en terrenos del Ejército Mexicano de Santa Lucía, del municipio de Zumpango en el Estado de México. De acuerdo a datos difundidos por el gobierno federal a solo unas horas de que aterricen y despeguen los primeros vuelos desde la nueva central aérea, se espera que en una primera etapa se movilicen al menos a 1.4 millones de pasajeros en su primer año de operación.

La obra en su totalidad, fue diseñada y ejecutada bajo la dirección y supervisión de ingenieros y técnicos del Ejercito Mexicano.

Entre sus aspectos más importantes, destaca el hecho de que se construyó con inversiones muy por debajo de las proyecciones que se habían hecho para el Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) promovido por Enrique Peña Nieto, pero basado en un esquema de contratación de deuda, el cual terminó por ser cancelado, ante su inviabilidad técnica, debido a que se construiría sobre el Lago de Texcoco, y financiera, por más de 13 mil 300 millones de dólares y un avance del 30% tan solo, al momento de su clausura.

Para tomar la decisión de ser cancelado, el presidente López Obrador realizó la primer consulta pública en su tipo para pedir opinión a la población sobre una mega obra de esas características, y aunque no tuvo una gran participación, el mandatario asumió la decisión adoptada por el 70% de los ciudadanos participantes, en el sentido de cancelar la obra. La consulta se realizó aún en su calidad de "presidente electo".

En contraparte al proyecto cancelado, el cual mostró su inviabilidad al paso de los meses -al quedar totalmente anegado-, el nuevo aeropuerto "Felipe Ángeles", costará, en sus tres etapas, 75 mil millones de pesos -esto es 3 mil 600 millones de dólares-, según informó la administración federal la semana pasada. Lo anterior, en relación al costo que se estaba proyectando para el NAIM, representa 9 mil 400 millones de "dólares" de ahorro, en cifras generales.

El ingeniero residente de la obra, Raúl Miranda, informó recientemente que la terminal tiene una construcción de 384 mil 128.16 metros cuadrados y que podrá albergar en su primer año, unas 119 mil operaciones.

La nueva central aérea arrancará operaciones este 21 de marzo con nueve operaciones aéreas de cuatro aerolíneas: Viva Aerobús, Aeroméxico, Volaris y Conviasa, las tres primeras con vuelos nacionalse y la última con un vuelo internacional.

El nuevo aeropuerto cuenta con la segunda torre de control más grande de México, con una altura de 88 metros, además de que cuenta, en una primera etapa, con espacios para 14 posiciones para aviones, lo que ha sido criticado por los grupos derechistas identificados con el PAN y el PRI, aunque e realidad ambos grupos han criticado todo en una estrategia golpista desde que AMLO los desplazo del manejo del poder y acceso a los recursos públicos.

La revista Forbes informó este fin de semana que el AIFA arranca operaciones con vuelos a Tijuana, Cancún, Monterrey y Guadalajara, además de un vuelo semanal a Caracas.

CONECTIVIDAD

El gobierno federal ha informado que para acceder al AIFA se tendrá conectividad a través del Circuito Exterior Mexiquense, de la carretera libre México-Pachuca, la autopista de cuota México-Pachuca y la autopista México-Querétaro.

En días previos el gobierno federal dio a conocer una tabla en la cual se establecen los tiempos de recorrido, desde distintos puntos hacia el AIFA, aunque se espera que los tiempos mejoren, conforme avancen las semanas y se incorporen nuevos servicios de transportación.

Se estima que los costos podrían fluctuar entre los 50.00 y los 150.00 pesos, dependiendo de la ruta que se tome y el tipo de transporte.