6 de febrero de 2018

El ataque y asesinato del precandidato a la presidencia municipal de Cuatitlán Izcalli, muestra el Estado fallido en materia de seguridad, pues hay una inoperancia del gobierno del estado de México para inhibir los índices de violencia, señaló Agustín Uribe, Secretario de Difusión y Propaganda.

Dijo que es lamentable que un integrante del partido oficial haya sido ultimado y la Fiscalía General de Justicia todavía no tenga una línea de investigación clara sobre lo ocurrido. Recalcó que, al igual que en este caso, la ciudadanía se enfrenta a la incertidumbre y a la negligencia.

Como también es lamentable – apuntó- el homicidio contra el primo del presidente de la República, Enrique Peña Nieto, Maximino Montiel Peña, quien fue encontrado sin vida en el municipio de Atlacomulco.

“La violencia está extendida en todo el territorio mexiquense, gracias al vacío de poder e ingobernabilidad”, subrayó.

El perredista urgió al gobierno de la entidad dejar los discursos y la demagogia, y convocar lo antes posible una mesa con los diferentes partidos a efectos de establecer una estrategia y generación de protocolos de seguridad para candidatos y funcionarios públicos, de cara a los próximos comicios.

Aunque, prosiguió, se busca que los aspirantes contiendan con libertad y no haya ninguna situación que ponga en riesgos el desarrollo del proceso electoral, no se puede olvidar que cada día los ciudadanos mexiquenses están expuestos a asaltos, secuestros, homicidios, feminicidios, por lo que la estrategia de seguridad debe ser incluyente, “sin dejar fuera a ningún sector”.

“Con discursos, el gobierno y los priistas no resolverán nada. Es urgente cambiar el Sistema político que lo único que ha generado es un estado de cosas inestables: violencia, pobreza y marginación. La inseguridad es el reflejo de un Estado fallido”.

Agustín Uribe puntualizó que el asesinato del ex diputado tiene que ser esclarecido, “No queremos historias inverosímiles respecto a este hecho”.

Staff Redacción