27 de agosto de 2019

Las empresas constructoras de gasoductos Carso, IEnova y TC Energy llegaron a un acuerdo con el gobierno federal para destrabar el conflicto que inició la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en febrero, anunció el presidente Andrés Manuel López Obrador en conferencia de prensa matutina. Después de las negociaciones, que iniciaron en julio pasado, estas concluyeron con un ahorro de 4 mil 500 millones de dólares para el erario público.

El director de la CFE, Manuel Bartlett, explicó que los principales acuerdos giraron en torno a la reducción de tarifas del servicio de transporte de gas, que era el punto central de la negociación.

"Se cambia el concepto de tarifa de inversión a una tarifa de transporte de mercado, con una investigación de las tarifas en Estados Unidos, Canadá y Europa", aseguró el titular de la CFE, agregando que el acuerdo permitirá la comercialización de 8 mil 200 millones de pies cúbicos de gas natural al día.

Como consecuencia de esta negociación el primer canal de distribución que entrará en operación será el ducto Sur de Texas-Tuxpan, que llevará el producto a la zona Golfo y centro de México.

“Quiero señalar o subrayar que esto fue posible por la voluntad, la disposición al diálogo de los empresarios. Legalmente ya se habían firmado los contratos, ya se habían acordado condiciones que nosotros consideramos dañinas para la Hacienda pública, y por eso se acudió a los dueños de las empresas para que, haciendo a un lado los compromisos legales, se llegara a un acuerdo en beneficio de todos", aseguró el mandatario, poniendo especial énfasis en Carlos Slim propietario de Grupo Carso, pues "fue el primero en llegar a un acuerdo con la comisión" en palabras del presidente.

Por su parte, el empresario expresó que “como parte de una gran infraestructura nacional, por medio de los cuales se podrá acceder al gas más barato del mundo que es el de Texas. Permitirán sustituir el diésel, que es más caro y más contaminante, y el combustóleo”.

En la misma conferencia, Slim Helú rechazó que hubiera abusos o corrupción en los contratos firmados durante el sexenio anterior. "En el contrato anterior eran pagos crecientes, en la propuesta y acuerdo de hoy son pagos parejos. Eso significa que podemos negociar mejores condiciones con los bancos porque nuestro flujo es mayor. Desde el punto de vista financiero nos permite conseguir más crédito a mejor tasa para seguir invirtiendo", aseguró. "Con las tasas de interés de hoy, que son bajas, conviene pagos parejos".

Héctor Castañeda