10 de febrero de 2020

Comuneros de San Francisco Xochicuautla, donde se construye la autopista de cuota Toluca-Naucalpan (a la adicional que ya existe), bloquearon con palos y piedras la autopista México-Toluca, en protesta por el asesinato de uno de sus compañeros el pasado fin de semana.

Los inconformes realizaron el bloqueo durante la tarde de este lunes y demandaron la pronta intervención de las autoridades mexiquenses, ya que ha venido en aumento la violencia en la zona, donde pese a amparos y otros recursos legales, las obras no se han detenido.

En días recientes, los comuneros realizaron también movilizaciones en protesta por la continuidad de las obras y afectaciones a su patrimonio intangible, ya que el trazo de la vía, atravieza lugares considerados como “sagrados” por los comuneros.

En esta ocasión, a la prostesta por la violenta y continuada agresión a su territorio, pues las obras no se han detenido pese a ofrecimientos que inicio en un principio la actual administración y la administración saliente de Eruviel Ávila, antes de irse, se agregaron otras dos demandas debido a hechos violentos que se registraron el pasado fin de semana en la zona y que habrían terminado con la vida de dos personas.

Los inconformes exigieron un alto a la violencia, pero también acciones diligentes por parte de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM), para resolver los dos homicidios, uno d elos cuales, habría ocurrido durante una riña.

Cabe destacar que los pobladores de San Francisco Xochicuautla, mantienen vigente su demanda en contra de las obras que se realizan en la zona boscosa y que agreden su patrimonio ancestral intangible.

Las obras benefician a las constructoras que historicamente, también, han sido beneficiadas por los gobiernos priístas de Edomex y que tienen conexiones con políticos y empresarios encumbrados durante el gobierno de Enrique Peña Nieto.

Pese a que por diversas vías y actores, se pidió al gobierno mexiquense cambiar el trazo de la obra, al final esta fue reanudada desde meses atrás, no sin presuntas amenazas contra familias completas de comuneros y líderes sociales que han venido denunciando los abusos y excesos por parte de los gobiernos estatales, primero el de Eruviel Ávila y ahora el de Alfredo del Mazo.

Actualmente las obras son ejecudas por la empresa Autovan Teya, filial de Grupo Higa y no obstante la invervención incluso de organismos internacionales en materia de Derechos Humanos, como la Comisión Interamericana de DH y la CNDH, al final las empresas y el gobierno mexiquense no han detenido la construcción de la autopista, misma que invade bosques de esta comunidad otomi.

ANTECEDENTES DEL CONFLICTO. RECORDANDO EL DESASTRE…

NOTA PUBLICADA EL 12 DE ABRIL DEL 2016 EN MEDIOS NACIONALES (TERE MONTAÑO)

Lerma, Méx., a 12 de abril de 2016.- Comuneros de San Francisco Xochicuatla despojados de sus tierras para la construcción de la autopista Toluca-Naucalpan y el gobierno mexiquense, acordaron instalar una mesa de diálogo e iniciar los primeros acercamientos para llegar a un acuerdo, luego de que este martes continuaran los trabajos de Autovan Teya, filial de Grupo Higa, con la custodia de policías estatales, quienes por la mañana desalojaron el último rescoldo (un altar) que quedaba en la zona del campamento, donde golpearon al propietario y desalojaron a otros de sus compañeros, para luego abrir paso a la maquinaria pesada que lo destruyó por completo.

Este último desalojo del campamento se registró muy temprano en la zona de conflicto tras el arribo de unos 200 granaderos, sin embargo aún se tienen contabilizadas al menos cuatro casas más programadas para destruirse, mientras que siete ya fueron pulverizadas por completo, sin contar los cientos de predios que fueron expropiados por decreto.

Personal de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y de su similar de Naciones Unidas (ONU), arribó al lugar alrededor de las 10:00 de la mañana para atestiguar y “documentar” los hechos. También estuvieron presentes elementos de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), quienes acompañaron en todo momento a los pobladores, los cuales defienden una pequeña capilla azul que aún queda en el lugar.

Por la mañana en la zona del “Campamento de la Digna Resistencia”, la maquinaria abatió un pequeño altar que todavía estaba en pie y al momento en que el propietario intentaba salvar tres imágenes religiosas, una de la Virgen, otra del Señor de la Exaltación y otra del Divino Rostro, fue sometido a punta de golpes y sacado del área; mientras que la otra capilla azul, ubicada a unos 200 metros de ahí, permanece cercada por la policía, mientras pobladores se niegan a moverse del sitio, donde se turnan para ondear desde sus pequeñas cúpulas, una bandera nacional.

Esta pequeña construcción se ha convertido en el núcleo de la resistencia otomí en las últimas horas, rodeada por pobladores y cercada por policías. En la mañana maquinaria pesada intento derribarla, pero un indígena, portando una imagen a la altura del pecho, se colocó entre esta y el santuario, evitando así que el avance del vehículo cuyo conductor se detuvo expectante y temeroso, ante el gesto valiente del indígena; otras personas, principalmente mujeres y adultos mayores, se refugiaron dentro del lugar, a manera de protegerlo y protegerse, rezando, llorando y cantando plegarias.

El "tshipada", como se le nombra en otomi a este pequeño sitio sagrado, tiene un profundo simbolismo para los pueblos cercanos, ya que representa un "descanso" en el camino hacia el Santuario del Señor de la Exaltación, ubicado en el paraje conocido como El Llanito, ubicado muchos kilómetros adelante a través de cañadas y cerros. Aquí las peregrinaciones vienen de todos lados, se detienen, danzan, cantan y ofrecen ofrendas de especias, pan artesanal y "una flor de plátano". Luego una sacerdotisa ofrece respeto a los cuatro puntos cardinales, para luego reanudar el camino. El "tshipada" no puede ser destruido, dicen.

Sin embargo, a lo largo del llamado Cerro de La Cruz, en el paraje conocido como “Los Tejocotes”, Grupo Higa tiene abiertos al menos tres frentes de trabajo con presencia de maquinaria pesada que rápidamente se abre paso entre el cerro, tirando maleza, removiendo tierra y escombros de las distintas construcciones que ya fueron derribadas con todo y muebles, ropa, papeles, trastes y patrimonio material e intangible de sus propietarios, algunos de los cuales permanecen atónitos en la zona, sin querer moverse y sin saber a dónde ir o que hacer, pues aseguran que no les dieron tiempo de absolutamente nada, tampoco fueron notificados con ningún documento oficial. Simplemente los sacaron a la fuerza y destruyeron sus viviendas. Otras familias que se encuentran en la línea de la autopista, intentan desesperadamente obtener ayuda de los organismos internacionales.

ACUERDAN MESA

Cerca de las 14:00 horas, representantes de “Serapaz”, reunieron a la población y explicaron que se acordó una mesa de diálogo con la intervención de la Secretaria de Gobernación (Segob) en la Ciudad de México. La condición que impusieron los comuneros fue que se apagaran las máquinas “porque no era posible ningún tipo de diálogo mientras estas siguieran operando”.

Serapaz AC, fue creada hace 20 años por Samuel Ruiz García, durante los conflictos con el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) y ha trabajado en conflictos recientes como el caso Atenco.

Citlalli Hernández, activista de Serapaz, explicó a los pobladores que la posición del gobierno del Estado de México “era dura y cerrada”, ya que se negaba en principio a sentarse a la mesa y también a “apagar las máquinas”. Les explicó que fue necesaria la intervención de la Subsecretaria de Derechos Humanos de la SEGOB. La reunión se realizó en las oficinas de Roberto Campa Cifrían, titular de la dependencia.

La Mesa de Diálogo finalmente fue acordada para realizarse este miércoles en la Ciudad de México. El gobierno mexiquense insistió en que se realizará en la ciudad de Toluca, pero el resto de las instancias de derechos humanos lo rechazo, por considerar que “no existían las condiciones para un diálogo” en la sede de la administración estatal, toda vez que el gobierno mexiquense había violentado al menos tres amparos. La activista explicó que la postura de las instancias defensoras de garantías individuales, era que la actuación del gobierno estatal el pasado lunes, cuando desalojo con violencia a pobladores en la zona de conflicto, era simplemente “inadmisible”. Se espera que el diálogo se realice a las 12:00 del día con la presencia de instancias de derechos humanos.

La maquinaria de Grupo Higa y Teya se apagó a las 16:30 de la tarde de este miércoles, casi minutos antes de que cerca de cien estudiantes de la Normal de Tenería, arribaran al lugar a bordo de dos vehículos.

AMPAROS

Los trabajos de reanudación de las obras de la autopista Toluca-Naucalpan, se reanudaron con apoyo del gobierno estatal, pese a la existencia de tres amparos otorgados por la justicia federal a diversos pobladores afectados en la zona. El Universal obtuvo copia de dos de ellos, uno promovido por el señor Venancio Hernández (que ampara a cinco familias) y otro más, de un segundo grupo encabezado por el comunero Antonio Miguel Reyes Valdez. En ambos casos los juzgados segundo y quinto en materia de amparo otorgaron la “suspensión definitiva” en contra de la obra, sin embargo estas resoluciones fueron violadas, ya que los juicios no estaban aún cerrados.

Mary Delgado