29 de septiembre de 2020

La Legislatura Local aprobó por mayoría de votos de Morena y el PRI, la reforma del senador Higinio Martínez Miranda que reducirá en poco más de un tercio el número de regidores y síndicos en los ayuntamientos mexiquenses, con lo cual y de no ser observada en tribunales, tendrá efectos en la conformación de los próximos cabildos tras los comicios del 6 de junio del 2021, al acotar de manera considerable los ediles de representación proporcional.

Tras una larga y polémica sesión como no se había visto hasta antes de la pandemia, las fuerzas representadas en el Congreso Local tuvieron un encontronazo entre Morena por un lado y el bloque integrado por PRD, PAN y PVEM por otro, y con un PRI que simplemente guardo silencio, al perfilarse como el principal benefactor de estos cambios y con legisladores morenistas que libraron su batalla…

El diputado del PRD, Omar Ortega, dio un intenso debate para intentar detener la reforma que técnicamente y de ser ratificada, podría hacer polvo la posibilidad de que el Partido de la Revolución Democrática tenga regidores de representación proporcional en la configuración de los próximos ayuntamientos, lo mismo que el PAN y el PVEM, de no lograr reposicionarse.

Dijo que la reforma morenista es regresiva en términos democráticos, pues regresa el reloj político unos 40 años, a la vez de asegurar que en realidad lo que busca la reforma de Morena es “mantener el bipartidismo en los cabildos”, cuidándose de no mencionar directamente al PRI.

El exdirigente perredista hizo varias reservas particulares, para intentar reconfigurar el planteamiento original de la iniciativa (con una propuesta alterna a la alza), sin embargo todas fueron descartadas; mientras que alternativamente fueron arribando legisladores a tribuna, para debatir a favor y en contra. Antonio García del PAN, dijo que se trata de un “golpe terrible contra la democracia” y que a todas luces la reforma aprobada, pretende terminar con la “representación proporcional de minorías en los ayuntamientos”, lo que pone en riesgo los derechos políticos de quienes actualmente son regidores y síndicos y buscarán reelegirse el año próximo.

También dijo que era confusa y hecha al vapor, que no tenía claros todos los términos en que fue planteada, ya que ni siquiera los legisladores de Morena que trabajaron en comisiones, precisaron la cifra que presuntamente se ahorrará con la reducción de regidores y síndicos, ya que la habían cambiado hasta en cuatro ocasiones.

Otros panistas como el coordinador Anuar Azar Figueroa, se enfocó en críticas hacia el gobierno federal de la 4T que encabeza el presidente Andrés López Obrador, lo mismo que otros legisladores de su bancada, a la vez que morenistas reviraron que su posición y responsabilidad es en el Estado de México, dónde han mantenido pactos históricos con los gobiernos del PRI y guardado silencio ante graves hechos de corrupción e impunidad como en el caso de la “Estaba Maestra”.

Justo al citar “Estafa Maestra”, la presidenta Karina Labastida (quien en otras legislaturas fue panista), los interrumpió abruptamente y luego la conminó a centrarse en el tema de la sesión.

Otras legisladoras que destacaron en este debate que podría ser histórico, en caso de que la reforma de Higinio Martínez quede firme, fueron la Morenista Elba Aldana y María Luisa Mendoza Mondragón del PVEM.

Aldana advirtió que la reforma fue manipulada de origen al ser presentada como una “iniciativa ciudadana”, cuando en realidad se trataba de una iniciativa del senador Higinio Martínez, lo que de hecho, alerto, puede configurar en un “fraude a la ley”, mientras que Mendoza Mondragón aseguró que la reforma de Morena no solo es injusta sino que atenta con principios democráticos básicos, a la vez que su coordinador, José Couttolenc dijo que la reforma no respeta la relación que debe persistir entre el número de votos emitidos y la representatividad en las comunas.

Los legisladores de oposición en su conjunto, cuestionaron en diversas ocasiones el argumento de la “austeridad”, y Morena precisó que se estima un ahorro de aproximadamente mil 500 millones de pesos.

Max Correa también aseguró por su parte que los regidores que busquen la reelección en las próximas elecciones, podrán hacerlo sin mayor problema, toda vez que podrán contender para formar parte en la configuración de los próximos cabildos, por lo cual rechazó que se vulneren sus derechos.

Con la reforma se reducen de mil 361 regidurías, actualmente a 954, lo que significará la disminución de 407 cargos, de los que 254 serán de mayoría relativa y 153 de representación proporcional.

En los municipios de menos de 150 mil habitantes, el ayuntamiento estará integrado por un presidente, un síndico, cuatro regidores de mayoría relativa y tres de representación proporcional.

En los municipios de más de 150 mil y menos de 500 mil habitantes, el ayuntamiento se conformará por un presidente, un síndico, cinco regidores de mayoría relativa y cuatro de representación proporcional.

Por lo que toca a los municipios de más de 500 mil habitantes, el ayuntamiento quedará integrado por un presidente, un síndico, siete regidores de mayoría relativa, así como un síndico y cinco regidores de representación proporcional.

Con lo anterior se prevé que habrá 99 municipios con menos de 150 mil habitantes en los que se disminuyen dos regidores de mayoría y un plurinominal; de igual forma, disminuye un total de nueve sindicaturas de mayoría y no se reduce ningún síndico de representación proporcional.

Todos los municipios contarán con presidente municipal, así como un síndico de mayoría relativa. En el caso de los nueve municipios con más de 500 mil habitantes, adicionalmente tendrán un síndico plurinominal.

Tras más de cuatro horas de debate, el diputado Faustino de la Cruz realizó reservas a la propuesta original que fueron aprobadas por mayoría, y que finalmente disminuye 407 regidores en relación con la integración actual: 254 de mayoría relativa y 153 de representación proporcional.

Tere Montaño