En otros términos, la página de la Secretaría de Seguridad del Estado de México es altamente insegura.
También aseguró que “en tres años hemos realizado, entre otros, 3 mil 800 Operativos Rastrillo, y 31 mil operativos en el transporte público, lo que nos ha permitido disminuir los delitos de alto impacto”.
Es curioso que mencione que los operativos en transporte público disminuyan los delitos de alto impacto, considerando que los delitos de alto impacto son homicidios, secuestro, extorsión y robo con violencia. Este último es el que más se realiza en transporte público, por lo que a priori, resulta engañoso generalizar los asaltos como si abarcaran todo el espectro de delitos de alto impacto.
Ahora bien, de octubre de 2017 a septiembre de 2018, es decir, durante el primer año de gobierno de Alfredo del Mazo, se registraron 10 mil 832 asaltos en transporte público en la entidad. Para el mismo periodo, pero entre 2018 y 2019, se contabilizaron 10 mil 134 asaltos, representando una disminución de 5.53%. En el mismo periodo, pero de 2019 a este año, hubo 6 mil 461 asaltos, una disminución de 36.25% con respecto al mismo periodo del año anterior y una disminución de 40.36% respecto al primer año de Del Mazo. Esto demuestra una tendencia a la baja en asaltos en sus tres años de gobierno.
Esto por sí mismo son buenas noticias. Entonces, ¿Por qué generalizar a TODOS los delitos de alto impacto en el discurso? Ese mero detalle hizo que el logro conseguido sea engañoso.
Otro dato bastante escueto en el discurso fue “Durante este año, hemos fortalecido el acceso a la justicia de las familias mexiquenses, y hemos impulsado la profesionalización de las corporaciones policiacas y de las instituciones de procuración de justicia”.
Considerando que, de acuerdo con Décimo Censo Nacional de Procuración de Justicia Estatal 2020, realizado por el INEGI, la entidad mexiquense es la segunda que más recursos destina a su Fiscalía (10.3%), esto debería ser cierto.
Sin embargo, y al consultar los datos relativos a procuración de justicia, ni siquiera el INEGI sabe las estadísticas sobre averiguaciones previas iniciadas, investigaciones y carpetas de investigación abiertas, teniendo que especificar que, “Para el estado de México y Sinaloa solo se incluye información de adolescentes”.
Esto quiere decir que, a pesar de ser la entidad con mayor incidencia delictiva, el gobierno del estado se reserva la información de delitos cometidos por personas mayores de 18 años, incluso a instancias oficiales como lo es el Instituto Nacional de Geografía y Estadística.
¿Cómo se facilita el acceso a la justicia, cuando no se facilitan datos de la propia justicia?
Esto deriva en que, de acuerdo con Impunidata, solo el 5.10% de los mexiquenses confían en el ministerio público. La efectividad en procuración de justicia es de 20.40%, con un 66.30% de efectividad en el cumplimiento de órdenes de aprehensión.
Esto indica todo, menos un fortalecimiento de los mexiquenses para acceder y obtener justicia ante un ilícito. De hecho, en el ranking de impunidad de Impunidata, el Estado de México aparece en los últimos lugares, solo detrás de Tlaxcala, Veracruz, Chiapas, Guerrero, Tamaulipas, Puebla y Oaxaca.
Por último, no se puede hablar de fortalecimiento del acceso a la justicia cuando cada mexiquense debe esperar en promedio 196.51 minutos para denunciar. Solo para denunciar.
Conclusiones:
En el informe de gobierno, es obvia la evasión de datos que podrían ser una incomodidad para el mandatario. Es sencillo decir que “se implementaron acciones”, “se fortaleció” y frases similares cuando eso implica deshacerte de un asidero de datos duros que permita determinar si es cierto o falso lo que dice.
Al final, pareciera que el informe de gobierno fue un ejercicio de percepción. Desgraciadamente, esto viene acompañado de una opacidad importante. Es el caso de la impartición de justicia. Y el caso de considerar a los asaltos en transporte público como un símil de los delitos de alto impacto.
Calificación:
En conjunto, la sección de “seguridad” que el gobernador mexiquense le dedicó a su discurso es engañosa, por la omisión deliberada de datos, como el estado de los delitos de fuero común. Adicionalmente, y habla mucho de la escasa transparencia, la imposibilidad de corroborar datos duros como el número de comercios enlazados al Centro de Mando de la Secretaría de Seguridad Estatal, lo hace inverificable.
En cuanto al papel de los retenes para reducir los delitos de alto impacto en transporte público, la falsa generalización lo hace extremadamente engañoso, concediéndole al gobernador la constante baja en este delito en transporte público.
Por último, es falso que se haya fortalecido el acceso a la impartición de justicia, en un estado con altas horas de espera para denunciar, a pesar de la alta cantidad de dinero que se le destina a este fin. No es más fácil el acceso a la justicia, la cual en el estado es cara.
Fuentes:
Alfredo del Mazo Maza. Tercer Informe de Gobierno.
https://www.facebook.com/AlfredoDelMazoMx/videos/2683232298593040 Consultado el 26 de octubre de 2020.
Impunidata. Impunidad en tu estado.
https://impunidata.org/impunidad-en-tu-estado Consultado el 27 de octubre de 2020.
Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública. Incidencia delictiva del fuero común.
https://www.gob.mx/sesnsp/acciones-y-programas/incidencia-delictiva-del-fuero-comun-nueva-metodologia?state=published Consultado el 26 de octubre de 2020.
Secretaría de Seguridad. Gobierno del Estado de México.
http://sseguridad.edomex.gob.mx/