31 de julio de 2021

Vicente Fox Quezada (2000-2006), pasó a la posteridad en la historia de México al haber logrado sacar al PRI de los Pinos tras 71 años de gobiernos ininterrumpidos desde prácticamente la revolución, y lo hizo como efecto de una enorme ola de esperanza, que no rápidamente se convirtió en frustración masiva, ante la falta del cumplimiento de compromisos que resultaban vitales para revertir los procesos de impunidad y corrupción que ya desde entonces mantenían sumido al país en altos niveles de desigualdad, pobreza e impunidad. Desde entonces Vicente Fox es también, sin duda alguna, uno de los mayores traidores de la democracia En México.

Su llegada marca en si mismo el carácter fraudulento con que movería muchos hilos de su gobierno, ya que su triunfo es resultado también de un sistema paralelo de financiamiento, procedente de aportaciones irregulares a su campaña por parte de acaudalados empresarios organizados, cuyas personalidades y operaciones mediante triangulaciones de recursos, se conocerían bajo la denominación "Amigos de Fox", un consorcio empresarial cuyo objetivo era precisamente llevar a Fox por vía del panismo a la presidencia de la República. Y lo lograron, aunque nunca se conoció con precisión, el monto de recursos aplicados a su campaña de manera ilegal.

Contradictoriamente y aunque su gobierno tuvo importantes cambios (como la instauración de todo un sistema de transparencia en la administración pública de todos los niveles y regulares puntajes en el manejo económico), al final Fox terminó fusionándose con los modos priístas que pretendía originalmente combatir.

Su compromiso 7 de campaña señalaba textualmente: “Me comprometo a poner fin al sistema de complicidad y de privilegios y a combatir la corrupción sin salvedades, pero sin venganzas políticas ni revanchas partidistas”, si bien cumplió a la perfección lo segundo, lo primero de este compromiso le resultó simplemente imposible. Su gobierno quedó marcado por los negocios desde el poder que rápidamente comenzaron a extenderse desde su propia familia.

Manuel y Jorge Bribiesca, hijos de Martha Sahagún, esposa de Fox, estuvieron involucrados en tráfico de influencias, uso de información privilegiada y delitos fiscales, formalmente declarados así por una comisión legislativa investigadora en 2014, al haber operado a favor de la empresa “Oceanografía”, para que Pemex le adjudicara millonarios contratos.

La comisión investigadora, años más tarde, estuvo a punto de iniciar juicios contra los Bibriesca, pero la intervención y presiones de Fox pararon el escándalo. No obstante en 2014, directivos de Oceanografía, fueron llevados a prisión, al haber incurrido en un multimillonario fraude contra Citibanamex.

Otro de los escándalos que marcaron el gobierno foxista, fueron los intentos fallidos por sacar al actual presidente, Andrés Manuel López Obrador, del escenario político, mediante un desaseado y apresurado proceso de desafuero.

Por si fuera poco, el gobierno foxista también se mancho de sangre. En 2006 y a la par con Enrique Peña como gobernador del Estado de México, lanzó un megaoperativo de represión contra la población de San Salvador Atenco, que terminó con la detención bajo persecuciones, excesos policiacos y tortura, de 204 personas. El objetivo era aplacar las manifestaciones de rechazo a la construcción del aeropuerto en Texcoco.

De manera similar a como lo hizo en Atenco, Fox envío fuerzas federales para levantar bajo una intensa jornada represiva a finales de octubre del 2006, a miles de profesores de Oaxaca que se mantenían en paro y tomado el centro de la ciudad, derivado de conflictos con el gobierno de Ulises Ramírez, a quien le demandaban mejoras en sus condiciones laborales.

Los operativos que se extendieron por al menos tres días, terminaron con al menos 7 personas muertas, más de 40 maestros detenidos y un número indeterminado de lesionados.

Asimismo la promesa de juzgar abusos del pasado, creando para ello una fiscalía especial, terminó en nada.

Este domingo, se realizará la primer Consulta Pública en México, para que hechos del pasado relacionados con abusos y excesos cometidos por los últimos cinco expresidentes del país, entre los que se encuentra Vicente Fox, sean juzgados por estos hechos.

Si bien la pregunta original (juzgar a los expresidentes de México) fue replanteada por la Suprema Corte de Justicia (SCJ) y el INE prácticamente se negó a promover la consulta, se requiere lograr un 40% de votos a favor, para que los resultados de este ejercicio ciudadano “sean vinculantes”.

Si deseas participar en la Consulta Pública de este domingo, en el siguiente link puedes ubicar tu “mesa receptora” o (casilla). https://ubicatumesa.ine.mx/


Ma. Teresa Montaño