02 de marzo de 2022
Las próximas elecciones para renovar la gubernatura del Estado de México, impondrán retos importantes para todos los partidos en pugna. El escenario que se avizora se irá complejizando conforme se acerque la fecha de los comicios, hasta mediados de 2023, sin embargo el partido en el poder ya comienza a calentar motores, los cambios recientes en el gabinete estatal son solo la llave de la estrategia que se ha armado desde el gobierno mexiquense y el PRI, para intentar mantenerse en el poder y sí, a costa de lo que sea -ya sabe, son capaces de todo- por lo cual los ciudadanos, sobre todo aquellos que se han visto agravados por las disfuncionales y discriminatorias fallas en la administración pública, con impactos en sus vidas en distintas dimensiones, deberán involucrarse y mantenerse informados para tomar decisiones acertadas. No olvide que hablamos de un futuro de seis años.
Por otro lado la batalla electoral implicará que Morena de Edomex, si realmente quiere acceder al poder y terminar con 80 años de perpetuidad priísta, deberá actuar con inteligencia y anticipación, aunque insisto, si realmente busca la alternancia que tanto demandan ya los ciudadanos, pues como sabemos el partido "de la esperanza" esta infiltrado totalmente desde su arribo a la entidad en 2018, con facciones claramente del PAN y del PRI sin lugar a dudas.
Ya algunos analistas incluso nacionales han advertido que el morenismo mexiquense, está completamente infestado por estos grupos que sin duda estarán operando -lamentablemente desde la propia dirigencia- a favor y veladamente del tricolor. De hecho ya comenzamos desde el trienio pasado a ver los indicios de esta infección que amenaza con desbordarse en 2023.
Sin embargo si nos colocamos del lado ciudadano, veremos claramente que el gobernador Alfredo del Mazo con todo y el control y compra del Congreso Local y prácticamente todo el escenario político, tendrá que enfrentarse a una dura y evidente realidad ciudadana: es clara y absolutamente rechazado por los ciudadanos.
El costo de este rechazo será muy alto y sí, intentará comprarlo...
EL RANKING DE LA VERDAD
Los datos duros son contundentes a un año y medio o menos de las elecciones. En el ranking de gobernadores de diciembre del 2021, con el que se cerró el año y en el que se evaluaron no solo la popularidad de los gobernadores, sino también su percepción ante la población en rubros como desempeño, seguridad , honestidad y corrupción, el mandatario mexiquense obtuvo uno de los peores resultados en todos estos años de pálida gestión.
Por ejemplo en materia de seguridad la efectividad de Alfredo del Mazo lo colocó hasta el fondo de la tabla, en el lugar número 30, con una "aprobación" de solo 45%, solo arriba de Rutilio Escandón, de Chiapas, con 43% y de David Monreal, en Zacatecas, con 35%.
Los mejor evaluados en el tema de seguridad fueron Mauricio Vila Dosal, con 86%, Miguel Barbosa de Puebla, con 83% de aprobación y Diego Sinhué Vallejo, con 80% de aprobación. Es decir con puntajes que le dan la vuelta al ejecutivo estatal.
Pero quizás el mejor retrato que se hizo del mandatario sobre cómo lo ven los ciudadanos, son los que obtuvo en los tópicos de honestidad y corrupción.
En el primer tema, sobre calificar la "honestidad" del mandatario en cuestión, el gobernador del Estado de México obtuvo el "último" sitio en la tabla del ranking, es decir el lugar 32, con una calificación de 6, mientras que en contraparte, en el tema de corrupción obtuvo el único primer lugar de toda la encuesta. ¿Lo puede creer?
Es decir, que el mandatario estatal es percibido, de acuerdo a los resultados del Ranking de Gobernadores al cierre del 2021, como un mandatario poco honesto y corrupto o el más corrupto, pues no olvidemos que en este capítulo sí obtuvo el primer lugar.
Por lo que hace al tema de desempeño, en general, la calificación que se le dio al mandatario mexiquense fue del 27.83% y el lugar número 32. El último en la tabla.
La percepción ciudadana en este sentido, es que tiene el peor desempeño de todos los gobernadores de México, aparte de los dos puntos descritos arriba.
Por lo anterior queda claro que Alfredo del Mazo y el PRI, tendrán que remar cuesta arriba para lograr retener la gubernatura del Estado de México, aunque de ello también dependerá del resultado que se obtenga en las elecciones de este año en otros estados, en la que también habrá renovación de gubernaturas. Hidalgo será clave, sin duda. Lo que es un hecho es que estos resultados incluso de otras encuestas, como por ejemplo las de "percepción de inseguridad" del INEGI, las de pobreza de CENEVAL o las de corrupción, también del INEGI, muestran claramente dos cosas: primero, el fracaso de la administración estatal para garantizar bienestar, seguridad y justicia, y, segundo, el rechazo por ende del ejecutivo estatal, el cual está llegando a puntos históricos.
PARA IRME
El aumento del 37% de los diputados en la LXI Legislatura es inconcebible. ¿A cambio de qué les dieron este incremento que los volverá millonarios en tres años y sin haber hecho aún nada, prácticamente, que mejore las condiciones reales y palpables de los mexiquenses? Lo único que han hecho es negociar las tragedias y darle largas a las verdaderas acciones de cambio. Toerar la corrupción, en síntesis nada práctico. Varias pueden ser las respuestas: un fiscal carnal que garantice impunidad para los priístas y el grupo Atlacomulco, completo, si pierden las elecciones del 2023; reformas contrarias por venir, al interés ciudadano y silencio ante la monumental corrupción del Edomex. ¿Se le ocurre alguna otra respuesta? Escríbame: acá abajo.
Hasta la próxima