Algunos historiadores, ubican su primer antecedente en 1910, cuando en la segunda Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas, celebrada en Copenhague, Dinamarca, con la asistencia de más de 100 mujeres procedentes de 17 países, se proclamó el Día Internacional de la Mujer Trabajadora. Al año siguiente, en ese país se organizaron mítines para obtener el derecho al voto.

En Estados Unidos ya había un día dedicado a la mujer desde 1909, aunque de manera nacional, celebrado 28 de febrero, y se siguió celebrando el último domingo de febrero hasta 2013.

Detrás de esta iniciativa que retumbaría en todo el mundo, estaban dos pioneras defensoras de los derechos de las mujeres: Clara Zetkin y Rosa Luxemburgo, quienes por cierto no ubicaron un día preciso para la fecha, aunque si determinaron el mes de marzo.

La fecha coincide con dos grandes eventos en los que las mujeres trabajadoras fueron víctimas y protagonistas.

Uno de ellos, fue el movimiento de protesta por la falta de alimentos iniciado por las mujeres rusas el 8 de marzo de 1917 que desembocaría en el proceso revolucionario de octubre de ese año. En esa fecha miles de mujeres rusas se lanzaron a las calles en una jornada histórica para exigir “paz y pan”, pues cientos de sus familias habrían quedado destrozadas por la guerra y en la más absoluta miseria.

El otro acontecimiento fue el incendio intencional en Nueva York de la fábrica textil “Triangle Shirwaist”, registrado el 8 de marzo de 1908, en el que resultaron calcinadas 146 obreras, principalmente migrantes procedentes de Europa, que habían ocupado las instalaciones en protesta por los bajos salarios y las inhumanas condiciones en que desempeñaban su labor. El accidente, de acuerdo a diversas fuentes, fue provocado intencionalmente, por lo que docenas de ellas quedaron atrapadas y murieron calcinadas, mientras que 71 personas más resultaron gravemente lesionadas.

Este siniestro ha marcado la celebración del Día Internacional de la Mujer Trabajadora, transformado años posteriores en el “Día Internacional de la Mujer”, el cual se conmemora así desde 1975, cuando desde entonces se convierte en una fecha emblemática “para conmemorar la lucha histórica por mejorar la vida de la mujer”, aunque cabe mencionar que desde 1922 se celebraba también en China. En España se celebró por primera vez en 1936.

Las celebraciones desde entonces han alcanzado todas las latitudes y formas en el mundo, desde marchas y protestas, hasta plantones, foros culturales y expresiones artísticas diversas que se unen a nivel mundial en una sola y poderosa voz, para confirmar la presencia e importancia de la mujer en el progreso de las culturas y las naciones.

No fue sino hasta 1995 con la aprobación de la Declaración y la Plataforma de Beijing, una hoja de ruta histórica firmada por 189 gobiernos hace 20 años, hasta que se estableció agenda para la materialización de los derechos de las mujeres; y en 2015 con la inclusión del objetivo 5 en los ODS.

Los logros de esta lucha han ido de a poco pero han sido contundente, el reconocimiento de las mujeres como ciudadanas y el derecho al voto, fue uno de los primeros que se alcanzó en Estados Unidos y se extendió al resto del mundo; la regulación de las jornadas laborales, prestaciones de maternidad; el derecho al estudio y al trabajo que en algunas naciones se consideraban exclusivos para el hombre, entre otros.

La Organización de las Naciones Unidas (ONU), formalizó el 8 de marzo como Día Internacional de la Mujer para celebrar la lucha histórica de las mujeres, por la igualdad y la equidad en el mundo del trabajo, la política y la familia.

Derivado de este día, desde 2017 se realiza también el 8 de marzo el Paro Internacional de Mujeres, que busca promover la huelga internacional de mujeres en las actividades laborales, buscando dar respuesta a la violencia social, legal, política, moral y verbal actual que sufren las mujeres contemporáneas en diversas latitudes.

De hecho, en el primer paro internacional, participaron mujeres de 50 países, incluyendo México.

Actualmente la agenda de las luchas feministas se centran en el combate a la violencia de género en sus diversas dimensiones, la desigualdad laboral y la violencia política, entre algunas otras, aunque ahora cada sector de las mujeres, cada estrato y en cada espacio, luchan por objetivos específicos debido a las diversas opresiones que enfrentan como parte de un Estado patriarcal y violento.


VIOLENCIA FEMINICIDA

Datos del Secretariado Ejecutivo de Seguridad Pública (SENSP) del gobierno federal, indican que durante el gobierno de Andrés Manuel López Obrador se registraron 5 mil 362 presuntos feminicidios en México, aunque en total se reportaron en el sexenio casi 20 mil asesinatos de mujeres, incluyendo aquellos casos clasificados como "feminicidios".

Por otra parte, durante los primeros 100 días de gobierno de la presidencia Claudia Sheinbaum -la primera mujer en alcanzar esa importante posición en México-, el ritmo de desapariciones en el país no ha disminuido.

En ese lapso se registraron mil 259 desapariciones, de las cuales 559 corresponden a mujeres de entre 10 y 19 años de edad. Es decir la mayoría jovencitas.

En el caso del Estado de México durante el gobierno de Delfina Gómez Álvarez -también la primera gobernadora en Edomex-, se han registrado 105 feminicidios entre septiembre del 2023 -cuando arribó al cargo- hasta enero del 2025. Desglosando cifras podemos señalar que entre septiembre y diciembre del 2023 se registraron 25 feminicidios, en 2024 un total de 73 y en enero del presente año -única cifra disponible hasta el momento por el SENSP- se reportan 7 feminicidios más.

Paradójicamente desde que llegó Sheinbaum al poder, se eliminaron de la página del SENSP las estadísticas históricas "mensuales" y anuales" relacionadas con el homicidio doloso de mujeres en todo el país, datos clave para dimensionar el tamaño de la violencia feminicida mortal en México, a través de un análisis evolutivo de cifras.

Estos indicadores eran de acceso público hasta el pasado sexenio.

La única cifra disponible (en una consulta realizada a la página del SENSP consultada a las 10:00 horas -hora de CDMX-), señala que en enero del 2025 se registraron 187 homicidios dolosos de mujeres, de los cuales el Edomex reporta el mayor número en cifras absolutas con 14 casos señalados en el recuadro, aunque en el texto del reporte se indican 15 homicidios dolosos de mujeres en Edomex, solo en enero pasado.

Además de todo lo anterior, la última Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH) que data del 2021 -no se ha hecho otra-, indica que el Estado de México ocupa el primer lugar nacional en prevalencia de violencia contra las mujeres de 15 años y más "a lo largo de la vida" con un 78.7%, ocho puntos arriba del promedio nacional que se ubicó en 70.1%.

El segundo lugar en prevalencia de este tipo de violencia contra las mujeres, se ubica la Ciudad de México, con 76.2% y Querétaro en tercer lugar con 75.2%. La encuesta también arrojó que durante el encierro en los hogares motivado por la pandemia del Covid-19, un 5.2% de mexicanas de 15 años y más, reveló un aumento en la violencia en el ámbito familiar.

La encuesta del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), reveló por otro lado que al menos el 42.8% de las mexicanas de 15 años y más de edad, ha sufrido al menos un incidente de violencia en su vida.

Asimismo y de acuerdo con los resultados de la ENDIREH 2021, la violencia psicológica es la de mayor prevalencia entre la población femenina de 15 años y más edad, con 51.6%; le sigue la violencia sexual con 49.7%, mientras que el ámbito comunitario es el sitio donde las mexicanas sufren violencia con mayor frecuencia, con un 22.4%, mientras que el ámbito laboral es el segundo sitio reportado con un 20.8%.

PARA LA ONU TODOS TIENEN UN PAPEL EN EL #8M

ONU Mujeres ha señalado que en este 2025, todos tienen una papel que pueden jugar para ampliar y hacer efectivos los derechos de la mujer en el mundo.

En un comunicado señaló que hay suficiente información para establecer que existe un vínculo fundamental entre género, equidad social y cambio climático y reconocer que, sin igualdad de género hoy, el futuro sostenible y equitativo seguirá estando fuera de nuestro alcance.

La desigualdad de género es el mayor desafío de nuestro tiempo. Y la igualdad de género, la mayor oportunidad.

Advierte que la igualdad de género redunda en beneficio de la gente, el planeta y la paz, por lo que es urgente invertir en las mujeres y la igualdad, ya que de no hacerlo el costo para los países tendrá un precio muy alto.

Mediante un comunicado, aseguró que en el 30.° aniversario de la Plataforma de Acción de Beijing se nos brinda una ocasión que no debemos desaprovechar para recordar a líderes y activistas que nuestro futuro común depende de la igualdad de género y del empoderamiento de todas las mujeres y niñas.

La ONU ha enumerado como acciones urgentes para niñas y mujeres las siguientes: una revolución digital para ellas, segundo, terminar con la pobreza en que están sumidas las mujeres tanto adultas como infantes, pues al menos una de cada diez en el mundo "vive en pobreza extrema"; tolerancia "cero" a la violencia para todas, pues al menos 1 de cada 3 ha sufrido o sufre violencia; como cuarto punto la ONU advierte la urgencia de que las mujeres tengan "poder pleno" de decisión; garantías de acceso a una auténtica "paz y seguridad", así como "justicia climática".

SI NOS TOCAN A UNA RESPONDEMOS TODAS... !!